Hace unos días se celebró en Barcelona la presentación del Dakar 2018, en el evento aprovechamos para charlar con Gerard Farrés, siempre es un placer escuchar sus aventuras y anécdotas relatadas con su habitual sentido del humor.
¿El cambio en la navegación en el Dakar 2017 fue positivo?
La carrera ha cogido una dinámica muy buena con el tema de la navegación, con los WP contrôle, el cambio ha sido muy positivo, pero ahora deberán encontrar el punto de equilibrio, ya que algunos días era demasiado difícil, hasta el punto de que no sirve ni la intuición, de hecho, la suerte formaba parte de la carrera. Hace falta tener referencias. Tiene que ser igual de difícil pero sin que sea tan importante el factor suerte.
Nos extraviamos hasta seis veces en una etapa, perdiendo mucho tiempo, incluso nos encontrábamos otros pilotos de frente, no sólo de moto, también de coches, lo que puede resultar peligroso.
En una carrera como el Dakar, la más dura del Mundo, ¿se puede disfrutar?
Si, es la más dura, pero esta carrera no se puede disfrutar, hay que ser un tío muy duro para terminar esta competición. Disfruto precisamente cuando me estoy muriendo y veo que los demás aún se encuentran peor que yo, me rio por dentro pensando: “sí señor, tu aguantas”; entonces nos miramos e intentamos sonreír, hacemos ver que estamos fuertes, es feo, pero es un tema de supervivencia, aquí la psicología es importante.
¿Qué deberían mejorar en la carrera?
A los pilotos nos gustarían unas especiales más largas e incluso duras, que en vez de 30 horas, es decir 3 horas por día, preferimos 5 o 6 horas por día de especiales, pero que después no hubiera 700 km de enlace en el que vamos a 100km/h. El problema es que hacemos demasiadas horas de enlace por carretera. Nosotros llegamos al vivac y a veces no ha podido llegar aún la asistencia.
Imagina que a las 8 de la tarde te dicen: “hay de despertarse a las 2 de la noche”, tenemos que pintar el roadbook que esto ya son dos horas, después el breafing, seguidamente hacemos un breafing interno con el equipo, al final necesitamos 5 o 6 horas más. Por ello, si llegamos a las 5 o las 6 más las 6 horas que necesitamos para hacer todas las tareas que hemos comentado, dormimos solamente dos horas, es muy poco. El horario se nos ha comido, este año no hemos tenido tiempo para nada, durmiendo muy poco, al igual que las asistencias todos hemos hecho muchos kilómetros y demasiados de enlace. Es necesario encontrar un punto de equilibrio, esta es la clave.
¿Es posible que los organizadores se encuentren que los países al pagar mucho dinero quieren que la carrera pase el máximo de tiempo posible por su territorio, complicando aún más el poder montar un recorrido más adecuado?
Si, efectivamente este es un hándicap, los organizadores deben conseguir enlazar diversas provincias en muy pocos días, por ello debemos ir de una a otra recorriendo muchos kilómetros. Es como si fuésemos de Barcelona a Sevilla y a la mañana siguiente de Sevilla a Galicia… además con poca ropa, comiendo lo justo, durmiendo muy poco, en ocasiones mojándonos, es una pasada, esto es lo más duro. Si además las asistencias en ocasiones no llegaban, pues imagínate, sin comer, durmiendo en el suelo… Aunque sea la competición más dura del mundo, la organización tiene que pensar que la carrera también vive de los amateurs y los que están a su alrededor. Tengo claro que necesita más cambios.
¿El Dakar en estas condiciones se vuelve demasiado duro?
Es más duro mentalmente que físicamente, ya que la posición que llevamos en la moto es bastante estática, no sufrimos tanto de los brazos o de las piernas, y aunque vayamos derechos, no estamos tirando de la moto. Para poner una comparación es como si cada día hicieras 22 horas de coche, además con un descapotable, que te toca el aire, te mojas, y durmiendo solo dos horas cada día… además con cambios muy bruscos de temperatura, 50º en Paraguay o Argentina, con mucha humedad, seguidamente con un frio inhumano y otra vez con mucho calor, el cuerpo no lo aguanta…y dices ¿pero que es esto???!!! Llegas destrozado a la vuelta, y después necesitas un tiempo de adaptación.
Los problemas anteriores con la altura parece que este año no han sido tan importantes, ¿cómo ha sido?
Es verdad, no se si fue porque el tercer día subimos de Argentina a JuJuy a 5.000m y seguidamente bajamos a 2000m a dormir, y a partir de ese día volvimos a subir, si hubiéramos subido de golpe y ya no hubiéramos bajado, seguramente lo habríamos pasado peor, yo creo que esto nos ayudó mucho. Nos tomamos unas pastillas específicas para esto y las hojas de coca también van bien. De todas maneras, nosotros este año nos hemos preparado mucho con máquinas específicas.
Terminar el Rally y además conseguir un buen resultado entre los mejores pilotos no es nada fácil
Ahora hay 30 tíos con motos oficiales, que además son campeones del mundo de enduro, de motocross, especializados en carreras de resistencia y rallys, entre ellos 12 Hondas oficiales y semioficiales, de KTM y Husqvarna hasta 10, de Yamaha 6 más, junto con muchísimas privadas, por lo que nos encontramos un nivel de pilotos buenísimos, todo ello resulta una importante dificultad para poder luchar por los puestos de cabeza.
¿Qué es lo que más te motiva de competir cada año en la prueba?
Para mi, lo que me motiva realmente del Dakar, y lo he demostrado, son sus valores, claro que lo más importante es la clasificación, pero me llena mucho que millones de personas que han venido a verte, que nos reciben sonriendo solamente con verte pasar, que les das la mano y ya son realmente felices, algunos con silla de ruedas, les tocas y sonríen con aquella cara…, llego al vivac con una motivación y trempera que es una pasada. La gente en estos países te lo dan todo, hacen lo que sea para ayudarte, con aquella alegría, ellos ven que tu llegas de Argentina, de muy lejos, con unas motos llenas de barro, para ellos eres como un torero que te juegas la vida, no lo entienden, deben pensar a estos que les pasa??, la gente forma parte de la carrera, es toda una fiesta para ellos, es precioso.
Gerard, tú has vivido muy de cerca esta generosidad y colaboración de sus gentes
Si, por ejemplo en mis primeras participaciones, que sufrí muchos problemas, al pararme, salían grupos de gente de todos los rincones para ayudarme. Alguno de ellos, incluso me cambió la rueda trasera, me mandó emails y al final nos hicimos amigos, yo ahora le regalo cosas, incluso han viajado más de 1000km para venir a verme, sin tener un euro, ahora nos conocemos incluso con la familia, es una pasada la unión que se puede llegar a conseguir entre el aficionado y el piloto, esto no pasa en ninguna otra carrera. En otra ocasión, encontré una chica con una pancarta que ponía Farrés, no la conocía de nada, se me acercó con los ojos rojos de llorar junto a su hermana, y me dijo, “yo le sigo y hace dos días que viajo para verle…” una emoción brutal al ver que hablan con el corazón.
Esta gente no quieren perderse la caravana del Dakar y se llegan a situar en la zona verde del medio de la autopista, aguantando más de 6 horas, con una nevera, sillas e incluso una carpa, viendo pasar y saludando a los pilotos con una bandera a 50º… entonces yo no paro de saludarles, hasta tal punto que mis hombros se llegan a cansar más saludando que pilotando, hay pilotos que no lo hacen para no cansarse.
En la última especial la emoción subió hasta al máximo, cuando os jugabais la tercera posición entre Van Beveren especialista en la playa y tú, ¿cómo tenías que ir para superarle????!!!!
Si, fuimos muy rápidos, la estrategia del equipo de Beveren fue rebajar hasta 30kg menos en su moto, sacando todos aquellos componentes innecesarios, incluso se llegaron a sacar la visera del casco, mientras que nosotros hicimos otra táctica que también tenia sus riesgos, pero yo tomé la decisión de montar un neumático trasero de motocross que en etapas cortas va bien, pero cuando es muy rápido el neumático se degrada muy de inmediato y puede romperse fácilmente, sin poder terminar. Pero yo había probado muy bien este neumático antes y sabía perfectamente que podría aguantar los 60 km de especial, pero claro, sinceramente habían dudas, mis rivales me decían: “esto no te aguanta”. También mis compañeros de equipo se fueron colocando en distintos kilómetros de la especial y me informaban de cómo iba en cada paso por este punto, así tenía referencias directas de cómo iba. Yo estaba pilotando más rápido que el francés, por lo que decidí mantenerme y el empezó a recuperarme tiempo, pero igualmente pude terminar con el mismo crono, pero venciendo y en el podio final.
La verdad, después de este Dakar, no hemos visto un equipo Himoinsa de carreras, hemos visto una equipo de amigos, no tendrán lo mejor, pero la unión que hay entre todos es brutal.
Lo que hemos hecho en este Dakar es impresionante, viendo a mis compañeros como se paraban para ayudarme, haciéndome señas de cómo iba, se me puso la piel de gallina, en cada zona pensé todo el gas del mundo farreti, era mi oportunidad, tenía una euforia al terminar, levanté el brazo, no sabía si había hecho tercero o cuarto, pero al llegar a meta estaba exultante, pensé: “esto que han hecho mis compañeros no tiene precio.”
Las cosas las pueden pintar muy bonitas: “yo trabajo en equipo, bla, bla, bla…” pero después las cosas internamente son como son, en mi caso, yo le digo a Antonio Gimeno: “¿puedes ir tú al breafing, que yo tengo que terminar de pintar el road book y quiero ir a dormir deprisa?”, y él me responde: “si sí, claro”, y se va rápido, cuando decimos algo es porque realmente lo necesitamos, hacemos un gran trabajo en equipo, él sabe que podemos conseguir el podio.
En la segunda etapa Miguel Puertas que se encontraba al final de la etapa, al ver que Antonio Ramos no venía se fue de noche a buscarlo
Si, al final de la etapa de 600 kilómetros y de noche, Miguel me dice que no ha llegado Antonio y que debe ir a rescatarlo, yo le digo “pero si son 1200km de ida y vuelta y tú tienes que hacer de manager, aún nos falta el breafing”, me contesta: “es una prioridad, tenemos que rescatar a Ramos, haz tú las cosas”. Entonces Miguel se fue a buscarlo, llegó, lo intentó salvar, pero no fue posible, Miguel volvió sin dormir, esto en otro equipo lo habrían dejado allí.
Cuando tuviste aquel fallo eléctrico que tu moto no arrancaba ¿que pasó?
El segundo día se me rompió la bujía, cargándose las válvulas y el pistón. La moto después del refueling no arrancaba, al final se puso en marcha, fui muy poco a poco y antes de llegar a meta se volvió a parar, tuve que empujar y solicitar que el público me ayudara para poder llegar al final. Tuvimos que decidir si cambiábamos el motor o no, en este caso sufriríamos una penalización perdiendo todas las opciones. Al final no cambiamos el motor, decidimos repararlo.
¿Después de unas temporadas complicadas compitiendo en el Dakar con problemas, el paso al Himoinsa Team ha sido la mejor decisión?
La verdad, venía de dos años de quemar motos…de pasarlo muy mal, entre otras cosas por falta de presupuesto, aunque también debo dar gracias a Gas Gas, porque hoy estoy aquí. Después de esta etapa hablé con mi mujer y empezamos a reflexionar, yo no he competido para ganar un sueldo, lo he hecho para ser feliz, para sentirme bien y ser mejor, entonces pensamos o llega una oferta interesante o nada, me retiro. En aquel momento llegó la oferta de Honda para ser mochilero de Joan Barreda, en un equipo oficial, buen sueldo, buenas motos, pero ojo, de mochilero… mientras lo estaba valorando, llegó la oferta de Himoinsa, me llamó Miguel Puertas y me dijo. “somos una estructura privada, con motos KTM, ¿quieres venir?, me vino la idea a la cabeza de: “¿será otra vez como Bordone Ferrari?”. Era un buen proyecto pero terminó como terminó, hice un año con el equipo, me fue bien porque nuevamente me sentí vivo, pero se acabó muy rápido, tuve faena para encontrar un nuevo equipo con WildWolf un mes antes del Dakar.
La oferta me llegó y decidí dar el si, por un lado Miguel Puertas es un buen tío, honrado. Pero me animé sobre todo tras conocer a los jefes de Himoinsa, son unas bellísimas personas, vi una empresa muy bien organizada y hablando con ellos, me dijeron: “aquí no serás ningún número, serás una persona que te apoyaremos, te estimaremos, no te va a faltar de nada y podrás liderar el equipo”. Cuando llegué a casa a punto de firmar con Honda, tuve que tomar una decisión muy complicada, al final preferí ser humilde pero sintiéndome vivo. Los resultados han sido el premio de haber tomado la mejor decisión en aquel momento.
Nos da la sensación que el Equipo Himoinsa, no es un Team de pilotos, es algo más, un equipo de amigos, además, teneis pilotos que compiten por las posiciones delanteras y otros por detrás de la carrera, es sorprendente.
Mis compañeros me han ayudado mucho, trabajamos en equipo, estamos muy unidos, son auténticos, nadie de nosotros es superior al otro, todos somos muy importantes. Por poner un ejemplo, Rosa Romero, parece que no esté, es inhumano lo que ha hecho este año, independientemente de que hace su carrera, para nosotros es buenísima, en una etapa maratón le montamos unos neumáticos blandos que solo ella puede aguantar, por su ritmo y por su peso. En la etapa siguiente que era corta y con barro, yo le cambié las ruedas, me puse las suyas que iban mejor para aquella etapa y Rosa se llevo los míos. Gracias a este gesto, pude hacer una buena etapa. El perfil que tenemos de pilotos es perfecto, los otros equipos vip no pueden hacerlo, además tenemos unos mecánicos profesionales con mucha experiencia,.
¿Eres consciente de que la gente se alegró mucho de tu resultado?
Si si mucho, me doy cuenta, hasta el punto de que me encuentro con gente por la calle que no conozco de nada tanto en Cataluña como fuera de ella, me paran y me dicen: “niño, nos has hecho llorar”. Me gusta comunicarme a través de las redes sociales, en el Facebook, que me gusta mucho, es como una familia, haces videos, cuelgas fotos, etc y la gente te ve, les comentas cosas, nos escribimos. En la carrera no he podido estar tanto por el FB, en cambio por el WhatsApp si, me llegaron hasta 800 mensajes cuando estaba en Bolivia, los contesté todos, uno a uno, con mensaje de voz de 5 segundos en la misma salida del podio.
Yo me conformo con muy poco, soy muy feliz y aunque tuviera más dinero seguro que no cambiaria mi forma de ser.
No tengo que demostrar nada, hago las cosas por mi propia satisfacción y lo mejor posible y el día que no tenga ganas, pues me retiraré. Mi familia y yo nos conformamos con muy poco. Esto me ayuda a tomarme las cosas diferentes, vivo en un pequeño piso con una hipoteca de 40 años, pero soy muy feliz, no necesito más cosas, la gente que no tiene esta filosofía, no son mis amigos.
Empiezas a tener lo que te has ganado con mucho sudor
Me he quedado a gusto conmigo mismo. La victoria es superarse, no ganar y gracias a una buena familia, buenos amigos y unas creencias propias yo lo he conseguido.
Por ejemplo, Marc Coma ha sido uno de los mejores pilotos de la historia en el Dakar, yo cuando estaba en su equipo de mochilero, me fijaba mucho en las cosas que hacía para yo hacerlo igual, Marc estuvo en el sito adecuado y en el momento oportuno, un día le ofrecieron ser mochilero de Nani y al cabo de un año, lo hacían piloto número uno del equipo oficial, después el hizo una cosa inhumana, de hecho te puede llegar la santa oportunidad y no aprovecharla, pero en el caso de Coma, lo aprovechó y logró ganar cinco Dakar. Hay gente que tiene mejores oportunidades que las tuyas, la mía ha sido muy lenta, yo vengo de una familia trabajadora, que compramos una moto para competir en los endurets, empezando a los 14 años, muy tarde y recuerdo que mi padre, a los tres meses ya no tenia dinero para reparar la moto, en aquel momento estuve bramando seis meses… yo era los que de pequeño, cuando iba en coche reseguía con una moto de juguete las montañas, como si saltara, una obsesión innata, en el cole me decían si era tonto, decían: “este niño no está fino”, yo no veía el colegio, solo veía motos. Al final mi madre se puso dura, estudié administrativo e hice todo correcto. Para mi ha sido todo muy lento, suerte tuve de la RFME que me seleccionó, además de la FCM, que me ayudaron a subir, sin ellos yo no habría podido ser piloto profesional.
¿Crees que las RFME y la FCM, siguen actualmente ayudando a los pilotos de la cantera?
Yo creo que actualmente no hay la ayuda que recibíamos anteriormente, ojalá las federaciones y los patrocinadores que no están ayudasen, desconozco cómo, pero alguien tiene que poner ilusión de cara a apoyar el off-road. Si yo estuviera en esta época no habría sido piloto profesional. Antes, personas como el Sr. Álvarez, Jordi Más, Fernando Gil, tenían una trempera inhumana, con muchas ganas, hicieron que pilotos como Xevi Pons, Jordi Durán, Marc Coma, Antonio Villegas, Nani Roma, Xacob Agra, Francesc Cucharrera, Paul Soler… pudiéramos competir, nos apoyaron durante cinco o seis años, lo pagaron todo para salir al Mundial, gracias a ellos yo fui Campeón del Mundo Júnior en el año 2000. Fuimos Campeones de los ISDE 98, 99, 2000 gracias a ellos, pudimos crecer. Si esto ahora no se hace, es imposible que puedan despuntar pilotos buenos. De hecho, hay muchos jóvenes pilotos muy buenos, pero que no tienen dinero para competir a gran nivel en el Mundial y lógicamente no podrán conseguir lo que un día conseguimos nosotros. Es una pena, hay un vacío de 17 años de esta época nuestra que se cortó en seco, desde el año 2000 al 2017.
¿Las marcas de equipamiento y accesorios ayudan?
Ahora es muy difícil, en la época de júnior cobraba de una marca de cascos, de una marca de ropa, entre otros, y con esto podías ir compitiendo. En estos momentos esto ya no pasa. Yo te puedo decir que desde el 2001 hasta el 2014 no he cobrado por el equipamiento, e incluso hace cuatro años, tuve que pedir colaboración a otro piloto para conseguir un par de botas. Yo valoro mucho los sponsors que me han ayudado desde los primeros momentos, aunque sea una cantidad normalita y ahora, aunque venga alguno con una buena cantidad, no voy a sustituirlos, ya que estoy aquí gracias a estas pequeñas ayudas.
¿Por cierto, la comarca de Osona qué tiene que salen tantos pilotos buenos, sólo en el Dakar, tu terminas 3º, Nani Roma 4º en coche y Marc Solà 4º… ?
Si, somos muchos, aquí se respira motor por todas partes, también está Laia Sanz, Xevi Pons, Rosa Romero… sólo en el Dakar, pero tenemos muchos otros pilotos. Aquí lo tenemos muy bien, cogemos un campo de un payés amigo y enseguida sale una crono. Nos comunicamos a través de WhattsApp y enseguida nos juntamos casi 100 pilotos. Te sorprendería ver algún entusiasta desconocido como piloto que cada día practica y que con una moto de unos cuantos años, marca un tiempo muy bueno y mejor que nosotros. Es una pasada la fábrica de motoristas que tenemos aquí, salen como setas. Además, la niebla que tenemos en invierno, ayuda a dejar el terreno en perfectas condiciones.
Nosotros damos vida a este precioso entorno, la gente nos respeta mucho, sabemos cuidar del medio ambiente, si hay algo que no se encuentra bien avisamos, hacemos cursos con los niños y les explicamos los valores de las cosas, a ayudarse, a mi de pequeño me los enseñó mi padre y es perfecto a estas edades, aquí se respira esto, tenemos este sentimiento.
¡Qué GRANDE eres Gerard, muchas gracias por tu tiempo!
Fuente y Fotos: enduromagazine / Prensa Himoinsa Team©