Ni el intenso frío, ni la ausencia de lluvias desde hace más de 2 meses, pudieron deslucir el recorrido de la segunda edición de la Subida en Cuesta a Serinyana, prueba disputada el pasado 3 de diciembre en la localidad de Ogern de Bassella, con un formato tipo tramo cronometrado de enduro.
Sobre un trazado que recuperaba la prueba iniciada en 1975 y que todos los pilotos calificaron de muy divertido, se realizaron 2 pasadas cronometradas, siendo la mejor de ambas la que contaba para los resultados finales.
Los participantes de la categoría clásicas, utilizaron un recorrido alternativo, que se mantenía más fiel al original y evitaba las secciones más técnicas que sí tuvieron que afrontar el resto de categorías y que puso en apuros a más de uno.
Finalmente el piloto más rápido fue Miquel Pujol (KTM), que marcó en su segunda pasada un tiempo de 10 minutos exactos, que quedará registrado para ser batido en la próxima edición (la tercera) que se disputará en el 2018.
En la categoría junior, el vencedor fue Vicens López con un tiempo de 11’21” y en las clásicas, la categoría mas disputada, el vencedor fue el piloto local David Boix (Bultaco) que se impuso con un tiempo de 8’ 49” y solo por 3” de margen a Albert Fíguls (TM).
Tras la carrera, todos los participantes pudieron disfrutar de una paella, incluida en el precio de la inscripción, que reunió a casi un centenar de comensales mientras se realizaba la entrega de premios de la prueba.
Una buena iniciativa del Club SIP Sport, organizador también de la mítica Bassella Race 1, la de recuperar esta prueba con un formato diferente y divertido que seguro tendrá una inscripción más numerosa en próximas ediciones.
Fuente y fotos: Bassella