Con el paso del Enduro Pro Tour por Barcelona, Yamaha España nos invitaba a los medios de comunicación a la Finca Valldosera, en Olerdola, para presentarnos sus nuevas WR 2017.
Siguiendo con la tradición de la mayoría de las marcas japonesas, después de que en la temporada 2015-16 se presentaran unos modelos 100% nuevos, ahora Yamaha para las WR 2017 muestra únicamente un mínimo cambio en su plástica y en la decoración, lo justo para diferenciarla de sus anteriores versiones 2016.
Las motos de enduro presentes en Valldosera eran las WR 250F 4T y la WR 450F 4T, desafortunadamente ya no se encuentran disponibles las ligeras WR 250 de 2 tiempos, al no superar las restrictivas normativas Euro 4, perdiendo un modelo muy interesante por su agilidad, bajo peso y potente motor.
Precisamente, a causa de estos cambios y trámites de homologación con la nueva normativa europea anticontaminante que han tenido que superar todas las motos,se ha retrasado de manera muy importante la comercialización de la mayoría de las japonesas, que al igual que las Yamaha, no han estado disponibles hasta ahora. Con la entrada de este mes de mayo, las Yamaha ya estarán disponibles, por ello, ahora sí, publicamos la sensaciones que nos aportaron en su presentación.
Una de las principales características de las WR es que se mantienen fieles a su concepto de gran polivalencia, se muestran muy acertadas tanto para enduro, sea cual sea el nivel del usuario, como moto excursión sin pretensiones de competir, perfecta para transitar por senderos, trialeras, como por pistas y caminos de todo tipo, incluso es buena para competir en los rallys por el desierto, concretamente con la WR 450F, lógicamente con unas mínimas modificaciones.
Sin ir más lejos, Marc Solà, piloto apoyado por Yamaha España, suma ya dos participaciones con la WR 450F en el mítico Rally Dakar, finalizando las dos e incluso en esta última, se clasificaba en la 29º posición Scratch y 4º en la clase Maratón, demostrando su gran potencial y sobre todo su gran fiabilidad, con una WR 450F de serie, únicamente equipada con el montaje del Kit específico de depósitos de combustible y agua, junto con una buena puesta a punto de las suspensiones y el montaje de los instrumentos de navegación.
A la vez, en el Enduro, tanto en el Mundial, como en el Campeonato de España, los equipos de Yamaha son muy competitivos, demostrando su potencial, lo que les ha permitido subir al podio en diversas carreras.
HERENCIA DE LA CAMPEONA DEL MUNDO YZ-F
El equipo técnico de Yamaha, dirigido por Masato Yokoi, desarrolló y diseñó a partir de la base de la competitiva YZ-F, ganadora del Mundial de MX, una innovadora WR, aplicando la misma alta tecnología y un depurado estudio, para crear esta moto off-road, que se beneficia de la experiencia de la YZ-F, tanto en versión 250 4T comercializada el 2015, como la 450 4T que lo hacía el 2016, motos que llegaban al mercado con la clara intención de satisfacer a diversos tipos de usuarios desde sus inicios.
Las Yamaha destacan precisamente por su tecnología e innovación aplicada, principalmente en las mecánicas de las WR. Sin ir más lejos, la 450F equipa un motor monocilíndrico 4 tiempos, DOHC 4 válvulas, refrigerado por líquido, con el cilindro invertido e inclinado y la admisión por delante, junto con un cilindro también inclinado y salida de escape hacía atrás. El cuerpo de mariposa es de 44 mm, además el sistema de inyección de combustible se reprogramó con un distinto ángulo de pulverización que permite mejor la apertura de la válvula de mariposa.
El motor de la 250 4T también deriva de su homologa YZ-F, con una configuración muy similar a la 450, pero lógicamente con unas medidas más reducidas y compactas.
Con la idea de conseguir una mayor refrigeración, los radiadores muestran un ángulo diferente en los núcleos respecto al de la YZ-F, además equipan de serie un ligero y práctico electroventilador.
Otra de las innovaciones es el montaje de una caja del filtro del aire colocada delante, en la parte superior del depósito de combustible, permitiendo optimizar el rendimiento del motor y facilitando su acceso al realizar el mantenimiento.
Gracias al innovador diseño del motor, junto con el montaje de un colector de escape largo con forma serpenteante y a la nueva recolocación del depósito de combustible debajo del asiento, se consigue una excelente centralización de las masas.
Para el arranque, que no incluye interruptor de seguridad, se mantiene tanto la palanca como el práctico arranque eléctrico, con sistema de auto-descompresor, lo que hace mejorar la puesta en marcha cuando la temperatura del motor es elevada o al contrario, en bajas temperaturas.
La caja de cambios de 5 velocidades en la 450 4T y de 6 velocidades para la 250 4T, muestra un desarrollo correcto y una buena precisión en su accionamiento, con un óptimo funcionamiento tanto para enduro deportivo, como para excursión, con las primeras velocidades más cortas y las últimas un poco más largas y abiertas.
El embrague se mantiene por cable, el de toda la vida, aunque el tacto sorprende por ser bastante suave, además se puede regular con facilidad.
Entre los accesorios, destacar en la gama WR el Power Thunder, un práctico dispositivo electrónico que funciona con dos pilas AA que se conecta directamente a la moto, permitiendo externamente y sin herramientas, modificar las características técnicas del motor preestablecidas o configurables, cambiando los ajustes de los mapas de combustible y encendido, ajustando incluso la velocidad del ralentí, permitiendo verificar el tiempo de funcionamiento del motor.
PARTE CICLO
La parte ciclo destaca por un compacto bastidor de doble viga en aluminio, igual a la YZ-F, aunque con algunas pequeñas mejoras en su diseño. Respecto a los soportes superiores del motor, estos están fabricados en chapa de acero de 6mm de espesor. Igualmente el esbelto sub-chasis esta fabricado en aluminio, soportando en su base el asiento, guardabarros trasero, silencioso y el pequeño depósito de gasolina, logrando con ello una mejor centralización de la masa del motor.
Otra de las principales diferencias entre las dos, la encontramos en la parte ciclo, concretamente la distancia de ejes, menor en la 250 1.446mm, por 1.465mm en la 450. Un dato que como veremos permite a la 250 obtener una mejora en la agilidad y dinamismo.
La WR también destaca por las suspensiones, montando uno de los mejores materiales de serie, con horquilla delantera invertida Kayaba KYB® de doble cartucho, con separación de aire y aceite en cámaras independientes (AOS). Esta horquilla de alta tecnología, dispone de un recorrido de 310mm, destacando por su buena puesta a punto de fábrica, teniendo en cuenta la polivalencia de la enduro WR.
En la parte trasera también se mantiene el mismo amortiguador de la MX, con sistema Yamaha Monocross de bieleta, ofreciendo un recorrido de 318mm, aunque convenientemente ajustado para baja y alta velocidad, con un tarado específico para el enduro.
En el equipo de frenos, encontramos un freno de disco delantero de gran diámetro, 270 mm (en la 450 4T) y de 250 mm (250 4T), mientras que detrás en las dos versiones tenemos un disco de 245mm. Un conjunto con el que se obtiene una eficaz y potente frenada. De cara a la protección del disco y la pinza trasera, incorpora un práctico protector en plástico.
En las ruedas, destacan unas llantas de aluminio negras, la delantera de 21 pulgadas, y la trasera de 18”, junto con un eje trasero de 22mm. El neumático montado es un Metzeler Six Days Extreme FIM de enduro, cuyas medidas son 90/90/21 delante y 130/90/18 detrás.
Las Yamaha WR, muestran un buen acabado y calidad de sus componentes, con detalles como un efectivo caballete en aluminio, una cadena sellada, mejorando la fiabilidad de este elemento, un pequeño instrumento digital con pantalla multi-función a la altura del manillar, destacando un testigo de combustible y otro que nos avisa de un fallo motor. Para mejorar la seguridad, se incluye un protector de espuma para el soporte de manillar, además, debajo del chasis encontramos un protector de plástico especial.
Para los clientes que quieran darle un toque más Factory, mejorando sus prestaciones, Yamaha comercializa una serie de prácticos accesorios originales con el nombre de GYTR.
SENSACIONES AL PILOTAR LA WR-F
Sentados en el largo y plano asiento, nos encontramos con una posición adelantada, correcta y cómoda, con una carrocería delgada, compacta y muy minimalista, únicamente el falso depósito en su parte frontal, junto con las placas del radiador, se muestra visualmente algo ancha en esta zona, aunque igualmente permite moverse con facilidad, permitiendo cambiar los pesos con total rapidez encima de ella. A destacar la altura del asiento, 965mm, una de las más altas entre su competencia.
La posición de pilotaje es cómoda, con todos los mandos cerca, dejándonos con una postura ideal, junto con un manillar que permite ajustarlo en cuatro posiciones distintas.
Estéticamente es atractiva, manteniendo los colores azul típicos de Yamaha, con una gráfica realizada en molde, que varía mínimamente con rayas blancas y algo de negro.
Arrancamos directamente, al no tener llave de contacto, le damos al botón y se pone en marcha fácilmente. Resaltamos una vez más, que la llave de contacto es muy práctica sobre todo para los usuarios que realizan salidas o excursiones como medida preventiva ante los robos o para evitar un arranque no deseado, pero parece ser que las marcas se empeñan en eliminarlo de sus modelos.
Para llenar el depósito de combustible encontramos el tapón escondido debajo del asiento, ubicado bajo una pequeña tapa suplementaria delantera extraíble, que a la vez, hace de prolongación del mismo asiento y que se accede estirando a presión. Un sistema diferente y que necesita algo de adaptación en su funcionamiento. Encima de este, encontramos otra pequeña tapa que esconde el filtro, se accede a él girando unas pequeñas anillas que nos permiten sacar la espuma con total facilidad para su mantenimiento.
Contando con una buena parte ciclo, formada por un chasis en aluminio, junto a unas destacables suspensiones Kayaba, bien ajustadas de fábrica, especialmente para el enduro, nos encontramos cómodos, además al rodar, obtenemos un buen rendimiento de la amortiguación, con un funcionamiento suave, principalmente a baja velocidad, pero con una buena capacidad de absorción en los fuertes impactos. La respuesta del conjunto es muy buena, mostrándose predecible y muy estable.
Desde los inicios aporta una gran seguridad en recta y en el paso por curva, sin que se mueva en absoluto, siguiendo la trayectoria que le marcamos, lo que nos permitirá realizar espectaculares inclinadas con total facilidad rodando muy rápido.
Precisamente en estas zonas más rápidas y bacheadas, el conjunto de la suspensión sigue manteniendo su buen funcionamiento, absorbiendo perfectamente todas las irregularidades del terreno, notando seguidamente que se van endureciendo, aportando una impresionante estabilidad, junto con una buena seguridad y gran aplomo, además de una gran confianza que nos permite rodar fuerte. De hecho, estos nuevos tarados de la suspensión ayudan a reducir el cansancio del usuario en los largos recorridos.
Beneficiándose de una buena manejabilidad y agilidad, nos permite jugar con ella con facilidad, sobre todo con la 250F, sorprendiéndonos gratamente por sus buenas cualidades dinámicas. Si intentamos hacerla derrapar expreso, la WR se comporta de manera muy controlable y muy neutra.
Después de verificar que su peso real se encuentra sobre los 118kg llena, la 250 4T y de 123kg la 450 4T, eso sí, con todos los líquidos y accesorios de homologación instalados, lo que de entrada nos podría alarmar comparándola directamente con sus principales rivales, aunque a la hora de la verdad, estas parecen no verse perjudicadas por las teóricas inercias y el peso. Lógicamente esto se debe a que disfruta de un excelente reparto de los pesos, lo que permite que en marcha se note realmente más ligera de lo que en realidad nos indica la báscula.
Respecto a los frenos, apurando las frenadas la Yamaha responde con gran eficacia, potencia, efectividad y buen tacto, sin perder prestaciones con el uso intensivo.
WR 450F 4T, EXCURSIÓN, CARRERAS Y RALLY, TODO EN UNA
Entrando en las sensaciones de los motores, aquí sí que empezamos a notar diferencias entre la 250 4T y la 450 4T.
Los especialistas nipones han conseguido a nivel mecánico un motor de la 450 que muestra un comportamiento muy lleno y poderoso, principalmente en la parte alta, pero también con unos excelentes bajos, lo que permiten salir desde abajo con total rapidez, junto con una inmediata recuperación gracias a una curva de par muy lineal, que empieza desde las primeras revoluciones hasta arriba, aportando un gran par motor, que facilita su pilotaje, además en los pasos lentos y trialeros su tracción es sensacional, permitiendo escalar como un tractor, con poco gas nos ayuda a avanzar en todo momento, trepando por cualquier tipo de terreno, beneficiada a la vez por unos efectivos neumáticos Metzeler, que le dan el toque final en los terrenos más delicados.
No obstante, si nos quedamos encallamos, debido a su talla americana, junto a su mayor envergadura típica de las 450, necesitaremos estar en forma para moverla, encontrando a faltar algo más de soltura en estas condiciones. Precisamente en esta situación el electroventilador facilita una rápida rebaja de la temperatura del propulsor. La WR 450 se muestra vivaracha, incluso a baja velocidad, beneficiada por un poderosos propulsor. Destacar que en marcha no se notan las lógicas vibraciones de este tipo de motores.
La respuesta de la inyección es fenomenal, sin fallos, además, al abrir gas, es directa y agradable, sin sobresaltos, entregando mucha fuerza y potencia, aunque en este caso, comparándola con la YZ 450F de motocross, la WR es más controlable.
La caja de cambios, siendo de cinco velocidades, ofrece un correcto escalonamiento, bien diseñado y preciso, aprovechando todo el potencial de la moto. En caso de errar en una marcha, el motor recupera desde abajo con gran facilidad, solventando nuestro error, lo que será de gran ayuda para el usuario.
Destacar que si montamos el escape Akaprovic, reducimos peso, y a la vez, conseguimos una respuesta más explosiva. Sinceramente, creemos que para el enduro nivel usuario no es imprescindible cambiar el silencioso original, de hecho, altera en exceso su respuesta, comportándose más radical y exigiendo mayor pureza en el pilotaje. En caso de utilizar la moto para rally, sí que encontramos más lógico su montaje, por sus ganancias.
Comentar que gracias a una perfecta y precisa combustión, su autonomía con sus 7,5 litros de capacidad, le permiten realizar más de 100km, por ello, consideramos que su consumo es bajo.
Una vez probada, nos queda claro que con la WR 450F, encontramos dos caracteres diferentes, uno deportivo, ofreciendo una respuesta rápida, efectiva y con potencia de sobras, y a la vez controlable, lo que facilita su conducción, mostrándose ideal para todo tipo de usuarios, que les permitirá incluso conducirla con poco gas, con una respuesta totalmente llevadera, perfecta para las excursiones tranquilas, como por el contrario, aquellos pilotos que buscan rascar segundos en la crono, encontrarán en la 450 una buena aliada, que permite ir muy, pero que muy rápido y seguro.
WR 250F 4T INNOVADORA Y RACING
Si con la 450 4t, antes de subirnos, ya tenemos bastante claro lo que nos va a deparar, en la 250 4T, en cambio, el motor nos sorprende mucho más, por su alto rendimiento y por cómo transmite una elevada potencia desde abajo hasta arriba. Al abrir el gas, la moto responde con gran inmediatez y fuerza, dando la sensación de tener más cilindrada de la que posee. Ya desde bajas revoluciones, aporta unos bajos destacables por ser una 250cc, con unos medios y altos excelentes, acelerando muy rápido y directo, subiendo de vueltas de manera lineal, notándose sus genes de MX, sin mostrar ningún fallo en la transición de la potencia, incluso al subir en alturas esta sigue invariable.
Lógicamente, en la menor de las WR, si queremos ir rápidos y sacar todo su potencial, nos obliga a practicar un pilotaje bastante más racing, rápido y agresivo, tanto en cronos, como por entre senderos, en esta situación el motor nos acompaña perfectamente, invitándonos constantemente a seguir apretando, sin contemplaciones, llegando a circular realmente deprisa por entre los caminos. Si dejamos caer demasiado las revoluciones del motor, con una mínima insinuación de embrague, se recupera inmediatamente y sale nuevamente disparada. A la vez, trialeando, al subir por los obstáculos, la WR nos ayuda con un primer golpe de gas que fácilmente levanta el tren delantero, con total fluidez.
Para los pilotos Pro que quieran competir con ella, realizando una pequeña personalización, y en este caso sí, con el montaje del escape Akrapovic, la WR mejora sustancialmente, permitiendo competir con ella a buen nivel.
Gracias a la inyección y el poder variar fácilmente sus carácter con el Power Tunder, modificando su respuesta, esta nos permite adaptarla a nuestros gustos y nivel pilotaje, facilitando poder sacar todo su potencial y a la vez mejorara su control.
Beneficiándose de una buena parte ciclo, al igual que la 450, al pilotarla, la 250 4T, nos aporta una gran seguridad y confianza desde los primeros momentos, con una óptima rigidez de chasis y suspensión que nos permite ir a fondo, sin movimientos extraños, facilitando saltar con gran soltura al disponer de una suspensión que absorbe perfectamente todos las irregularidades del terreno, aunque sea muy roto o pedregoso, transmitiendo muy bien las sensaciones y copiando perfectamente todas los defectos del terreno, mostrándose encima cómoda. De la parte trasera, la notamos muy ligera, junto con una gran tracción, que nos posibilita subir por fuertes pendientes sin escarbar.
Aunque gira adecuadamente, se podría mejorar algo su ángulo de giro en aquellas zonas más cerradas y técnicas. De entrada tal y como hemos comentado el tema del peso, parece no ser el ideal, pero a su favor hay que comentar, que gracias a su excelente equilibrio y reparto de peso general, queda perfectamente compensada.
Con la Yamaha WR 250F se ha conseguido un buen equilibrio, una enduro que gustará mucho por sus cualidades técnicas, tanto a usuarios de todo tipo de nivel, como para los PRO, mientras que con la 450F 4T, necesitaremos más fuerza física para domarla si queremos intentar sacar todo su potencial, además la diferencia de pesos y agilidad entre ellas dos es bastante notable, por lo que la 450 4T, la encontramos más ideal para andar por las pistas o los Rallys.
Nos queda claro que Yamaha dispone de una gama con la que puede satisfacer a un publico bastante variado y no solo en el enduro y aunque las dos son muy parecidas, las diferencias muestran una 250 4T más Racing y una 450 aún más polivalente.
Agradecer la invitación de Yamaha España, siempre nos agrada poder probar y valorar sus motos de enduro, lo que que nos permite sacar interesantes conclusiones de sus últimas novedades y de sus pilotos Marc Solà y J.M. Murillo.
Fuente: enduromagazine Fotos: Yamaha Motor Europe©