Con la llegada del verano, Gas Gas presenta nuevamente la variante más racing de la gama EC 2T, en esta ocasión hemos probado la nueva EC 300 Réplica Factory, una clara evolución de las motos que compiten en el Mundial de Enduro esta temporada, y que después de muchas pruebas y ensayos sobre todo en competición, finalmente estas mejoras se han introducido en el modelo de serie, que ahora llega a las tiendas en esta versión especial.
Estos modelos específicos de Gas Gas, a partir de ahora, ya no llevarán el nombre de los pilotos oficiales, sino que este da paso al modelo Racing Factory.
La pasada edición nos encontramos con un pura sangre, una moto muy de competición, no apta para todos los usuarios, por lo que teníamos ganas de testar esta nueva evolución para saber si se dejaría domar a nuestras solicitudes o no.
Es posible que algunos entusiastas puedan pensar que la moto es la misma que la pasada temporada, solo con unos pequeños cambios estéticos, pero nada de esto, hay que reconocer que en Gas Gas siguen evolucionando una moto con una base muy buena para el enduro, tienen claro que no quieren perder el tren de la competividad, siguen disponiendo de una excelente moto de enduro, sobre todo en la clase del 2 tiempos, contando de serie con unos componentes de gran calidad en su montaje y con un carácter muy racing que le aportan un toque de exclusividad.
De entrada, la estética vuelve a impactar, con una imagen muy actual, gran presencia de color blanco y negro con menos rojo que antes, destacando el chasis por su color blanco que le queda perfecto, mientras que el basculante, las llantas y los bujes de aluminio, se han pintado en color negro, dejando una estampa muy seductora. Por el contrario, el color negro en estos elementos que son susceptibles en el momento de las ralladas y los golpes, hace que se note más cuando salta la pintura con el uso.
La plástica de su carrocería sigue la misma línea de los modelos actuales, viéndose modificada algo en el diseño de las minimalistas placas laterales traseras, en color negro, con la idea de mejorar la entrada del aire hacía el filtro, consiguiendo con ello, una mejora de la potencia y sobre todo del rendimiento del propulsor. El diseño de la carrocería es muy delgada, dejándonos mover encima de ella con total normalidad, solo la parte frontal, en la zona de los radiadores es más ancha, pero sin molestar en absoluto. El depósito sigue siendo traslúcido, ideal para ver el nivel de gasolina, con una capacidad de 9,5 litros. Nada a comentar sobre el tapón que se cierra y abre fácilmente con rosca. Sí es importante avisar que en el momento de la entrada de reserva, tendremos que repostar rápidamente, debido a que a partir de este momento, la autonomía cae en picado y nos puede dejar tirados fácilmente.
El asiento es más bien duro, pero totalmente ergonómico, facilitando el rápido movimiento encima de ella cuando estamos pilotándola.
La posición de conducción la encontramos perfecta, con todos los mandos a mano, incorporando unas alzas de manillar en aluminio, junto con un manillar Renthal Twin Wall 997 en aluminio con barra central y protegido con una morcilla. También se incluye un cuadro digital muy completo, equipado con interesantes parámetros, ideal sobre todo para aquellos que realizan salidas largas y les gusta obtener información variada de la moto. Igualmente la piña de los mandos eléctricos es pequeña y dispone de todos los interruptores necesarios. El puño de gas nos parece perfecto en su medida con un funcionamiento preciso y muy rápido a nuestras solicitudes.
Los puños son progrip que le aportan buen tacto, agarre y no dejan duricias en su uso intensivo. De serie incorpora los prácticos paramanos Poliesport irrompibles y abiertos.
CHASIS
En la parte ciclo, nos encontramos con el conocido bastidor perimetral al cromo-molibdeno, junto a un nuevo sub-chasis trasero que en esta versión es de aluminio, no de plástico como en los modelos standard, incorporando una excelente y moderna horquilla invertida Marzocchi de cartucho cerrado de 48 mm, con barras al nitrato, y botellas en color rojo, totalmente regulables en pre carga de muelle, compresión y extensión, con un recorrido de 305mm, que le aporta un funcionamiento impecable, y permite realizar una perfecta puesta a punto a gusto del piloto, con múltiples posibilidades.
De entrada se muestra rígida, pensada para la competición, lo que nos permite entrar muy fuertes en las curvas, tumbando con plena confianza, pero una vez rodamos con ella, nos damos cuenta que es muy sensible, se va endureciendo progresivamente y esta traga con todos los elementos que nos encontramos en el camino, notando un buen tacto, seguridad, y excelente respuesta ante todo tipo de piedras, tanto pequeñas como grandes. Además dispone de buena direccionalidad, con un radio de giro bastante óptimo.
En las trialeras y los senderos rotos se comporta muy bien, ofrece una respuesta muy adecuada y permite pasar por el lugar que le hemos marcado muy rápido, con gran comodidad. Junto a esta respuesta de la horquilla, encontramos en la parte trasera un conocido amortiguador Öhlins TTX 44, totalmente regulable en pre carga de muelle, compresión y extensión, con un recorrido de 298mm que acompaña perfectamente al buen comportamiento general de toda la parte ciclo, recordemos que se cambió el sistema de bieletas y la geometría del tren trasero hace un par de temporadas.
Los estribos están firmados por S-3, fabricados en titanio, que disfrutan de una buena base, facilitando un buen agarre en todo tipo de terrenos, permitiendo guiar la moto con total apoyo, además tienen la particularidad de poder variar su posición, encontrando la postura ideal según las preferencias o talla del piloto.
Probando la moto en diversas zonas, desde una crono hasta un sendero, tanto por chasis como por suspensiones, esta se muestra juguetona, sigue perfectamente nuestras demandas, posibilitando cambiar de dirección muy rápidamente, con total normalidad, junto a una estabilidad y manejabilidad que se ha visto mejorada, siendo menos rígida que antaño, lo que nos facilita el paso por curva rodando muy deprisa con un gran aplomo y total confianza.
La versión precedente equipaba una impresionante horquilla Öhlins, pero este elemento dejaba la moto prácticamente solo apta para pilotos muy preparados y fuertes físicamente, por lo que ahora muchos otros usuarios menos entrenados, podrán disfrutar de unas prestaciones de alto nivel, pero menos cansina y exigente con el usuario. Comentar que la medida de la moto sigue siendo alta, pero algo menos comparada con la horquilla de la anterior versión.
De serie encontramos un protector de cárter bien estudiado, firmado por AXP que protege perfectamente los bajos y laterales del chasis con un peso mínimo.
En la frenada seguimos encontrando el material firmado por Nissin, tanto en el delantero como en el trasero, desde la bomba como la pinza, montando latiguillos metálicos, junto con unos modernos discos de Galfer de gran medida, el delantero tipo “Wave” de 260mm, con pinza de dos pistones, mientras que en el trasero el disco “Wave” de 220mm de un solo pistón. El conjunto es excelente, aporta buen tacto, potente frenada y es dosificable, lo que nos permite realizar fuertes apuradas, sin desfallecer por el uso intensivo, ni clavar, contribuyendo a un total control de la moto.
Las llantas son unas Excel Takasago en color negro, montando unos efectivos Metzeler Six Days Extreme que nos gustaron por su eficacia y buena tracción en diversos terrenos.
MOTOR
Con la misma base de la EC 300, los técnicos de Gas Gas han cambiado la culata por otra más optimizada para competición, de la firma S-3 en color rojo, junto a un nuevo culatín específico, lo que contribuye a una mejor respuesta, más progresiva, teniendo en cuenta que además disponemos de la posibilidad de cambiar la curva de potencia del CDI a través de un
interruptor que monta junto a la culata y que podremos modificar fácilmente. Gracias a ello, nos permite en terrenos muy resbaladizos, suavizar un poco la respuesta del propulsor, (modo lluvia) sobre todo en el momento de acelerar, aumentando la tracción.
La bomba de agua se ha modificado para aumentar el caudal del líquido. Como todos los motores dos tiempos las vibraciones se hacen notar, y precisamente en esta versión es un tanto exagerada.
El carburador es un Keihin PKWS de 38mm de probada reputación, junto a una caja de láminas Vforce3, que ayudan a dulcificar la entrega de la potencia siendo ahora más progresiva. El arranque es exclusivamente con pedal, no incorporando el arranque eléctrico en busca de una rebaja del peso.
Destacar que el embrague también ha sido modificado, este es hidráulico de AJP, y se completa con una corona Rekluse, cambiando la tapa de los discos de la misma firma, lo que le aporta un buen funcionamiento, con tacto, suavidad y precisión, permitiendo utilizarlo con un solo dedo, sin apenas esfuerzo.
La caja de cambios se mantiene la misma de seis velocidades, con un desarrollo perfecto para el enduro, las primeras marchas mas cortas para trialear y las siguientes mas abiertas para obtener velocidad. La inserción de las marchas es correcta, pero se podría perfeccionar su accionamiento.
Para acceder al filtro del aire, deberemos sacar un pequeño tornillo que está insertado en la parte trasera del asiento con una herramienta, levantar el asiento y podremos acceder a este para substituirlo o solo limpiarlo, encontrándonos con una caja compacta, perfectamente aislada.
El pedal del freno trasero tiene un diseño perfecto, con una leva pequeña, contando con una superficie de buen agarre y con una medida ideal, se encuentra en una buena posición, solo comentar que en zonas de mucho barro, a veces, debido a que la leva pasa por la parte interior del chasis, esta puede quedar entorpecida en su funcionamiento.
La EC Racing Factory sigue montando el silencioso firmado por FMF Q Stealth, que facilita una buena respuesta, junto con una reducción del sonido.
En la trasmisión, encontramos una cadena regina junto con un guía cadenas en color rojo diseñado específicamente para el barro.
También comentar que el caballete lateral ahora se pliega mejor, sin el golpe seco de antes que se cerraba bruscamente y podía llegar a ser peligroso.
Si os gusta la EC Racing Factory es importante saber que también se puede adquirir en la cilindrada del 250cc, con idéntico montaje que su hermana la 300cc 2T, pero algo menos potente.
¿COMO SE COMPORTA?
En Gas Gas tienen claro que no se puede parar de evolucionar y aunque a veces pueda parecer que la evolución es muy menor, en la actualidad ya no vale aquello de unos mínimos retoques, cambio de adhesivos y a vender, no, ahora estamos en un momento en que el cliente en general conoce el mercado y ya tiene una idea bastante real del tipo de moto que le encaja, y sobre todo, aquellos que buscan las máximas prestaciones para ir al límite en competición tienen claro lo que necesitan, por ello Gas Gas, desarrolla y evoluciona una moto tan especial como la Racing Factory, que seguro gustará por sus cualidades dinámicas muy conseguidas.
La Réplica Factory es la Gas Gas ideal para la competición, una moto que nos permite salir a correr sin modificaciones, solo la lógica puesta a punto personal, tal cual sale de la tienda, destacando que con las novedades realizadas en esta versión 2013, hemos encontrado que el pura sangre de Gas Gas llega en esta nueva versión más domado, menos agresivo que antaño, lo que nos va a permitir un pilotaje algo más cómodo y menos exigente, mejorando la efectividad, lo que nos facilitará aprovechar mejor su potencial, que incluso este ha perdido algo en bajos, para hacerla toda ella mas lineal y algo menos agresiva, destacando por la igualdad en todos los regímenes, sin altibajos, entregando la potencia progresivamente en todo su rango de revoluciones, subiendo limpiamente de vueltas hasta el tope de revoluciones, disfrutando siempre de un gran par y potencia, pero mas controlable, con una abertura de la válvula más suavizada, lo que aumenta su efectividad en el aprovechamiento de toda su caballería.
Junto a un buen motor, encontramos una excelente parte ciclo, tanto de chasis como de suspensiones, una de las mejores y que más nos ha gustado su comportamiento entre los dos trenes, obteniendo un gran resultado, con una alta estabilidad, sin movimientos extraños, que acompaña perfectamente al buen hacer del motor, este nos permite ir muy rápido y a la vez entrar en las curvas o cambiar de dirección rápidamente con total confianza y control de la moto. En zonas cerradas o en trialeras gracias a su manejabilidad y a un peso teórico de 109kg, que pensamos aún debería de mejorar, nos va a permitir subir con bastante fluidez y soltura, pero si nos llegamos a enganchar podremos mover la moto con bastante facilidad.
La Racing Factory es indicada tanto para la competición como para los entusiastas amantes de buenas sensaciones, con diversión asegurada, que gracias a esta versión, seguro les permitirá sacar un mejor aprovechamiento de todo su potencial, con un golpe de gas muy directo y preciso que se traduce en diversión. Es posible que en las trialeras ahora tengamos que subir algo mas alegres, pero por poder del motor saldremos airosos, trepando fácilmente, con buena tracción, mientras que por los senderos y pistas nos permite ir con gran alegría y muy rápidos con marchas largas sin la necesidad de estripar a fondo.
Está claro que la Gas Gas EC 300 Racing Factory es una auténtica y completa enduro, diseñada y fabricada en nuestro país, con sus principales elementos de gran calidad y que no llega al diez sobre diez debido a algunos pequeños detalles segundones aún mejorables en su ensamblaje.
Agradecer la colaboración de Gas Gas, por la cesión de la moto, a Carles Vilaró el piloto de pruebas de enduromagazine, siempre dispuesto a sacar las conclusiones más fiables de cada moto y de Alfons Subirà por sus impresionantes instantáneas. A la vez queremos agradecer la amabilidad y colaboración de la Hípica Binomio, que nos cedieron sus impresionantes instalaciones para poder llevar a cabo una parte de la prueba.
Fuente y Fotos: enduromagazine.com / Subriaphoto COPYRIGHT ©